En CEAPRENDE, siempre hemos estado comprometidos con ofrecer una educación de conducción accesible y de alta calidad para todos. Nuestro compromiso se ha fortalecido desde el 31 de mayo de 2022, cuando se emitió la Resolución 20223040030355, que estableció los requisitos para que las personas con discapacidad auditiva puedan capacitarse y obtener su licencia de conducción en Colombia. Este hito marcó el inicio de un reto que asumimos con orgullo: ser uno de los primeros Centros de Enseñanza Automovilística del país en ofrecer programas de formación diseñados específicamente para personas sordas.
Desde el principio, nuestro enfoque ha sido integral. Formamos un equipo de trabajo con profesores sordos, intérpretes de lengua de señas, instructores especializados en conducción y expertos en seguridad vial. Juntos, adaptamos nuestras clases teóricas y prácticas para impartirlas completamente en Lengua de Señas Colombiana (LSC). La misión: derribar barreras y ofrecer una verdadera experiencia educativa para aquellos que, durante mucho tiempo, soñaron con conducir un vehículo, pero se enfrentaron a la falta de accesibilidad.
Formación Integral desde el Primer Momento
Uno de los primeros pasos fue capacitar a nuestro personal administrativo e instructores en LSC. Gracias a la ayuda de profesores especializados, nuestros equipos aprendieron a comunicarse eficazmente con personas sordas, desde las señas del abecedario hasta frases comunes y comandos específicos de conducción. Este proceso no solo permitió una mayor inclusión, sino que también abrió la puerta a la creación de un ambiente de confianza y colaboración.
El resultado no tardó en verse. En nuestro primer ciclo de formación, recibimos a siete aprendices sordos, quienes reflejaban en su rostro la emoción de ver su sueño hacerse realidad. Durante años, muchos de ellos habían recibido ofertas de obtener una licencia sin la formación adecuada, pero ellos sabían que tener una licencia sin saber conducir no era la solución. Querían aprender, sentirse seguros al volante, y sabían que CEAPRENDE era el lugar adecuado para hacerlo.
Adaptación de las Clases Teóricas y Prácticas
En las clases teóricas, creamos un espacio exclusivo para estos aprendices, con la ayuda de nuestra intérprete Vanessa. Fue fascinante ver cómo interactuaban con el Código Nacional de Tránsito, comprendiendo las normas, los comportamientos seguros en la vía, y las posibles sanciones. Poco a poco, el conocimiento se fue afianzando, y la seguridad en sí mismos creció.
Uno de los mayores desafíos fue crear un conjunto de señas técnicas para acciones específicas de conducción, como «presionar el embrague», «frenar», «acelerar suave», o «mirar el retrovisor». Utilizamos un simulador de conducción que replicaba todos los controles de un vehículo real, lo que nos permitió trabajar de manera segura y eficiente. Gracias a este simulador, tanto los instructores como los aprendices pudieron practicar cada maniobra sin exponerse a los peligros de la vía, facilitando la creación de un lenguaje común para la enseñanza de la conducción.
Resultados y Satisfacción
El éxito de este enfoque fue evidente cuando nuestros aprendices presentaron el examen teórico, obteniendo calificaciones superiores al 90%. Esto les permitió avanzar a la fase práctica, en la que se enfrentaron a uno de los mayores retos: conducir un vehículo real.
Gracias a nuestros vehículos equipados con señalización especial y retrovisores auxiliares, iniciamos las clases prácticas. Los nervios eran evidentes al principio, pero con la ayuda de nuestros instructores, que les transmitían calma y confianza a través de señas, los estudiantes lograron ejecutar cada maniobra con precisión. La comunicación fluida entre los instructores y los aprendices permitió un aprendizaje efectivo y sin barreras.
Al final del curso, todos los participantes aprobaron con éxito tanto las clases teóricas como las prácticas, y obtuvieron su licencia de conducción, no solo con el documento en mano, sino con la plena confianza de saber cómo conducir de manera segura.
Un Futuro Prometedor para la Inclusión
Hoy, en CEAPRENDE, estamos orgullosos de ser pioneros en la formación de conductores sordos. Cada ciclo de formación nos ha permitido aprender y mejorar nuestro programa, y ahora nos preparamos para recibir a nuestro cuarto grupo de aprendices. Con cada nuevo ciclo, reforzamos nuestro compromiso de ser el centro automovilístico con mayor experiencia y capacidad para capacitar a personas sordas en Colombia.
En CEAPRENDE, creemos que la inclusión es el camino hacia un futuro más justo y accesible para todos, y seguiremos trabajando incansablemente para hacer realidad los sueños de aquellos que desean aprender a conducir, sin importar las barreras que enfrenten